Está notablemente marcada por la creación de la reproducción del templo camboyano de Angkor-Wat, bajo la dirección del arquitecto Sr. Blanche. Este templo se instala para la exposición colonial nacional de Marsella en 1922, la exposición de Artes Decorativas en ParÃs en 1925 y la exposición colonial internacional de 1931 en ParÃs.
Después de la Segunda Guerra Mundial, la actividad se redujo debido a las dificultades inherentes a la guerra, y a que la escayola con fibras vegetales, tal y como la utiliza la empresa Auberlet & Laurent, ya no estaba de moda. Sin embargo, la reputación internacional de la empresa seguÃa viva.
Durante el Segundo Imperio, bajo el liderazgo del emperador Napoleón III, ParÃs inició su metamorfosis. Los arquitectos y decoradores imaginan, diseñan espacios, crean una arquitectura y un estilo donde la ornamentación con escayola y estuco se utiliza de forma abundante.
Del talento de los escultores decoradores, escayolistas y estucadores surgen capiteles, hojas, perlas, modillones, cariátides, cornisas, rosetones, etc. Todos estos adornos constituyen decoraciones notables con una estética y unos volúmenes particulares. El auge de la profesión estaba asegurado, el uso del yeso en la decoración estaba en su apogeo.
Se convierten entonces en referentes en este ámbito, hasta el punto de ser recompensados con numerosos premios internacionales como los premios Vancouvert y Toronto en 1898, Gante en 1913 etc. En 1919, los señores Auberlet y Laurent constituyen una empresa con el objetivo de continuar la actividad que seguÃa siendo próspera e intensa.
En 1961, Jean Lebufnoir, allegado del Sr. Fabricotti, entonces gerente de Auberlet & Laurent, se hizo cargo de la empresa y creó SA ANC Etablissements Auberlet & Laurent. Asistido por su esposa, infunde una nueva vida a la empresa y le devuelve su antiguo resplandor.
La actividad se desarrolla y se ponen en práctica nuevas técnicas (silicona, resina sintética, etc.). La colección se enriquece con multitud de modelos que permiten la creación de un catálogo y grandes proyectos tanto en Francia como en el extranjero, especialmente en Oriente Medio.
Thierry Lebufnoir, actual presidente de Auberlet & Laurent, se incorporó a la empresa en 1982 y participó en su buen funcionamiento hasta adquirirla en 1998. Bajo su liderazgo, la empresa pone especial énfasis en el desarrollo de su servicio de instalación. Particulares, decoradores y arquitectos acuden a su oficina de diseño en busca de valiosos consejos de expertos. Todos coinciden en que la empresa demuestra un sentido del detalle y de la estética inigualable, que le ha valido la confianza de sus clientes para realizar proyectos extraordinarios como el hotel Lambert, el hotel Kinsky, el Palacio del ElÃseo, el Palacio del Sultán de Brunéi, el hotel Soyencourt, etc.
Hombres y mujeres formados para responder a las exigencias de la empresa, trabajan respetando las tradiciones y las reglas del arte y se ajustan a los métodos artesanales, garantizando asà un trabajo de una calidad incomparable. La empresa siempre ha abogado por una polÃtica que combina tradición e innovación, con cuidado de preservar este excepcional saber hacer.
Esta filosofÃa le permitió en la década los 70 desarrollar, junto con los industriales, el uso de resinas adaptadas a su actividad. Este nuevo proceso reactivó la ornamentación, que habÃa desaparecido en parte después de la guerra.
De manera más general, la empresa utiliza nuevos procesos como el GRG (escayola reforzada con fibra de vidrio) que permite realizar formas contemporáneas de poco espesor y elevada resistencia.
Su director también realiza una gran labor de investigación en colaboración con ingenieros con el fin de encontrar soluciones a determinados problemas.Por ejemplo, la empresa se ha especializado durante varios años en la búsqueda de métodos de aislamientos térmicos y acústicos. Su dominio en este campo le permite respetar sus propios requisitos estéticos y arquitectónicos respondiendo al mismo tiempo a todas las limitaciones técnicas.
Hoy en dÃa, la empresa concede una especial importancia a la inversión en nuevas tecnologÃas 3D.
Las herramientas de escaneo 3D tienen varias ventajas que facilitarán el trabajo de los empleados presentes en la oficina de diseño de la empresa, en las obras o en los talleres. En particular, esto permitirá realizar los planos de las áreas en las que efectuarán las obras de forma más rápida y precisa para que todo el personal pueda trabajar con mayor eficacia anticipándose a problemas futuros.
La impresora 3D, por su parte, permitirá realizar maquetas y muestras para satisfacer las nuevas demandas de los arquitectos y los decoradores (BIM), proporcionar al cliente una representación visual más concreta, pero también y, sobre todo, para que los profesionales de la empresa adquieran nuevas habilidades, ya que podrán combinar su saber hacer con las evoluciones tecnológicas.
Estas innovaciones no han llegado para sustituir el trabajo manual, cuya calidad y precisión siguen siendo insustituibles, sino para optimizarlo.